XXXIV velas

Hoy soy yo quien sopla las velas
cierra los ojos y pide un deseo

sssssshhhhh

(es un secreto)

Gracias a los que un año más habéis estado a mi lado

Me gusta algo más que un culito

El verano deja al descubierto torsos, musculitos y tipitos de infarto. Chicos con prendas ajustadas, enseñando tatuajes y esos músculos de gimnasio. Ains, es que a una se le hace la boca agua. Pero, me pregunto si todos esos hombres desean sólo ser un mero atractivo sexual. Si todos esos hombres asumen conscientemente el papel de objeto erótico. Si es su único objetivo en la vida. Si su ego sólo se sube por las nubes cuando le sueltan un "vaya culito!". Me diréis que seguro que sí. Pues vaya pena.

Una de las tantas cosas que me llama la atención hoy en día es que cuánto más superficie de piel muestras más sexy eres. De verdad creéis todos que eso es así? que ser sexy es eso? No sé, pero a mi un hombre vestido como sea, pero que me muestre un andar terso y decidido, una mirada dulce a la vez que descarada y una sonrisa indiscreta me resulta mucho más sexy que todos los músculos al descubierto del planeta. Vamos, que un hombre así no puede hacerme evitar girar la cabeza. Y ese tipo de hombre no me provoca un "vaya culito!" sinó un "qué preciosidad!".

Para mi, pocos encantos tiene quien debe recurrir a lo más obvio para lograr que una mujer se fije en él. Lo verdaderamente sexy no reside en lo que se ve, sinó en lo que se insinúa.

Enseñar pecho no hace que un hombre sea más macho y mostrar un cuerpazo nos hace babear un tiempo, pero ser un encanto, una preciosidad, nos hace babear toda la vida.

Pero bueno, no quitemos mérito a todo ese musculito exhibicionista, pues han trabajado muy duro, casi no comen como les gustaría, horas y horas de gimnasio y se han gastado una pasta para ser esos tan deseados objetos sexuales. Para que después vaya una pámfila como yo y ni siquiera les demuestro el más mínimo interés más allá del "vaya culito!".

¿soy gafe o torpe en la vida?

A veces nos adentramos en un círculo vicioso de adversidades. Una y otra vez tropezamos en la misma piedra hundiéndonos día a día, minuto a minuto, en un pozo que no parece tener fondo. Llega un momento en que nos parece imposible encontrar las raíces de ese mal que parece acecharnos en cada esquina, en cada uno de nuestros actos, cual herrante encuentra en cada recóndito camino de su vida el más gafe de sus destinos. "¿Dónde estará la vacuna de todos mis males?" - no preguntamos. ¿A caso no hay cura o es que no tenemos agallas para aplicar todo aquello que nos haría dar un giro de 180 grados en nuestra vida?. ¿Nuestras vidas se han convertido en una bola de nieve que baja imparable o es que nos estamos ahorcando con una cuerda a base de dar vueltas sobre nosotros mismos? porque si es ésto último...ya nos vale! reinvención, queridos amigos. Es la única solución de salir bien parados de toda adversidad. A mi, hasta el momento, es lo que me ha funcionado.






Si seguimos siempre los mismos pasos seguiremos tropezando siempre en las mismas piedras.

Repito: es tiempo de cambios

La cosa no pinta gris, sinó negra. Hace tiempo que nos van contando que el fin de la dichosa crisi está cercano cuando ni tan siquiera divisamos aún el horizonte. Miles de empresas que cierran cada mes, más de un 20% de paro, recortes y un sinfín de desdichas que hace tiempo que duran y que nadie es capaz hasta el momento de ponerle freno. ¿Será que queremos solucionar las cosas de la misma manera que habíamos estado haciendo hasta ahora? ¿será ésa la piedra que no nos deja avanzar? ¿el aferrarnos a la manera de actuar que hemos llevado a cabo en estas últimas décadas?

Einstein ya dijo eso de: "No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo" y que toda crisi trae consigo "progresos, descubrimientos y grandes estrategias". Un mensaje positivo, sin lugar a dudas. Pero ello implica un "cambio" no sólo en la manera de ver las cosas sinó en la manera de actuar.

Ahora, en tiempos de crisi, muchos de los valores que hasta ahora funcionaban están de declivio dejando paso a una nueva era de valores, entre ellos la "creatividad". Plantar cara a la crisi y salir reforzado de ella implica el ser más creativo, constructivo y confiar más que nunca en uno mismo. No estamos en la era de los títulos académicos donde se prefiere la formación y el currículum sinó en la era donde se valora la creatividad, la mentalidad y el carácter emprendedor por encima de todos los títulos académicos que uno pueda tener. Creatividad, fortaleza, actitud ganadora, sin complejos, sin límites, ésto es lo que hará diferenciarnos los unos de los otros, de aquel que se ahoga en el fango del que saldrá reforzado y ganador de estos tiempos tan difíciles.

El mundo laboral, tal y como lo hemos conocido hasta ahora dará un giro de 180 grados, donde después de la crisi, paises como España podrán quedarse con un paro estructural del 12-18%. Por ello la importancia de empezar a pensar en la posibilidad de estudiar idiomas y salir al extranjero. Por ello la importancia de la imaginación, de la valentía. De ser capaz de dejar cosas atrás para empezar unas totalmente distintas. Y creo que aquel que en estos tiempos ande mal y y no lo haga...mal va y mal irá.

Lo dicho, es tiempo de actitudes y no de aptitudes. Adelante!!