29 de septiembre de 2017

Somos semilla, som llavor



No m’agrada qui escolta només aquell que pensa com ell, ni aquell que només respecta al qui fa el que ell vol. 

Tots som iguals sota aquest cel blau. Ningú per sobre, ningú per sota. Diferents en formes, però iguals en drets.

Dret per ser com jo vulgui, i no com em diguin. Dret de sentir-me com jo desitgi. Simplement vull ser, de forma lliure, perquè sóc lliure. Lliure per prendre les meves pròpies decisions, lliure per decidir. I ningú taparà la meva veu, la meva voluntat. Per molt difícil i dur que sigui el camí, recorre’l s’ho val, i molt.

Que no ens enredin, que no ens enganyin, tu pots ser el que vulguis ser i no qui té més força ha de tenir més raó. 

Avui escric en la meva llengua, una llengua que a tu potser no et diu res, però que a mi m’ho diu tot. Una llengua que ha estat perseguida de forma descarada en temps dels meus avis, i pares, i que ara continua essent perseguida, de forma més sutil, però igualment perseguida. Una llengua perseguida per ser diferent en un estat que odia les diferències i ens vol a tots callats i en filera, en una democràcia presonera i utilitzada per lligar, no per defensar llibertats, pau i harmonia.

Potser aconseguiràs llegir aquest escrit, però potser no. Aquí on visc, es tanquen mitjans de comunicació que no diuen el que l’Estat vol escoltar. Aquí on visc tanquen blocs personals com aquest, simplement per una frase, un cartell que no els agrada veure, per dir el que no els agrada llegir, perquè en el fons, els fa por els canvis; a uns per perdre el seu status quo, a altres per aquella ignorància que els fa porucs i mal·leables.

Visc en un Estat que empresona a gent pels seus ideals. Visc en un Estat on una part de la població aplaudeix que ens donin garrotades. Visc en un Estat on ens volen callar a la força, on sento que no ens estimen, on no ens volen, però paradoxalment no ens volen deixar anar. El per què, qui vol saber-ho ja ho sap.

Visc en un Estat on planten cara amb armes a la llibertat d’expressió i al dret de reunió. Visc en un estat on es persegueixen urnes i paperetes. Visc en un Estat pobre, pobre en diàleg, pobre en democràcia, pobre en somnis i ideals. I no, no visc en un d’aquests estats que segur ara t’estaràs imaginant, visc en un país de la tant anomenada democràtica i exemplar Unió Europea.

Per tot això, i molt més, vull fer i vull viure en un país diferent. I a vegades fa falta trencar per construïr alguna cosa nova.

Quan escrius la teva història, escampes mil llavors. Són les petjades dels teus peus que recolliran els teus hereus. Perquè tu potser, potser seràs! Tu pots ser, pots ser, un personatge singular. Siguem personatges singulars!



Per tu i pels que vindran, mai deixis de lluitar pel que creus. Podem ser la llavor del canvi, podem ser la llavor que farà créixer un nou poble, un nou país, un nou món, una nova forma de pensar i d'actuar.


Ens creuen enterrats, i no saben que som llavor.
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No me gusta quien escucha sólo a aquel que piensa como él, ni aquel que sólo respeta a quién hace lo que él quiere.

Todos somos igual bajo de este cielo azul. Nadie por encima, nadie per debajo. Diferentes en formas, pero iguales en derechos.

Derecho para ser como yo quiera, y no como me digan. Derecho para sentirme como yo desee. Simplemente quiero ser, de forma libre, porque soy libre. Libre para tomar mis propias decisiones, libre para decidir. Y nadie tapará mi voz, mi voluntad. Por muy difícil y duro que sea el camino, recorrerlo vale la pena, y mucho.

Que no nos enreden, que no nos engañen, tu puedes ser lo que tu quieras y no quién tiene más fuerza tiene más razón.

Hoy escribo en mi lengua, una lengua que a ti puede que no te diga nada, pero que a mí me lo dice todo. Una lengua que ha estado perseguida en tiempos de mis abuelos, y padres, i que sigue siendo perseguida hoy en día, de forma más sutil, pero igualmente perseguida. Una lengua perseguida por ser diferente en un Estado que odia las diferencias y nos quiere ver a todos calladitos y en hilera, en una democracia prisionera y utilizada para atar, no para defender libertades, paz y harmonía.

A lo mejor conseguirás leer hoy este escrito, pero a lo mejor no. Aquí, donde vivo, se cierran medios de comunicación que no dicen lo que el Estado quiere escuchar. Aquí, donde vivo, cierran blogs personales como este, simplemente por una frase, un cartel que no les gusta ver, por decir lo que no les gusta leer, porque en el fondo, les da miedo los cambios, a unos por perder su status quo, a otros por aquella ignorancia que los hace miedosos y maleables.

Vivo en un Estado que empresona a gente por sus ideales. Vivo en un Estado donde una parte de la población quieren que nos den palos. Vivo en un estado donde quieren hacer callar por la fuerza. Vivo en un Estado donde no me quieren, pero que paradoxalmente no nos dejan ir. El por qué, quién lo quiera saber, ya lo sabe. 

Vivo en un Estado donde las armas plantan cara a la libertad de expresión y el derecho a reunión. Vivo en un Estado donde las fuerzas de seguridad persiguen urnas y papeletas. Vivo en un Estado pobre, pobre en diálogo, pobre en democracia. Y no, no, no vivo en uno de esos países que seguro te vienen en mente. Vivo en un país de la hipervalorada Europa, vivo en España. 

Y por todo esto, y mucho más, quiero hacer y quiero vivir en un país diferente. Y a veces hace falta romper para contruir algo nuevo.

Cuando escribes tu propia historia, escampas miles de semillas. Son las pisadas de tus pies que recogerán tus herederos. Porque tu a lo mejor, a lo mejor serás! Tu puedes ser, puedes ser, un personaje singular.  ¡Seamos personajes singulares!



Por ti y por los que vendrán, nunca dejes de luchar por lo que crees. Podemos ser la semilla del cambio, podemos ser la semilla que hará crecer un nuevo pueblo, un nuevo país, un nuevo mundo, una nueva forma de pensar y actuar.

Nos creen enterrados, y no saben que somos semilla.


3 comentarios:

  1. ¿porqué habláis con tanta grandilocuencia? que fácil es manejar a la masa con cuatro mentiras. Si a tus padres y abuelos le reprimían por hablar en catalán a los míos los mataban arrastrándolos atados a la cola de un caballo. El drama de España es que se han juntado el hambre con las ganas de comer, políticos sinvergüenzas con políticos mentirosos, creo que eres joven pero los más mayores ya vivimos esto con Yugoslavia , pero bueno para que preocuparse si se va a hacer al final lo que digan los malditos políticos.

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  2. No es mi intención hablar con esa grandilocuencia que citas. Simplemente he querido expresar lo que en estos momentos siento, a lo mejor sí que llevada por las circunstancias tan especiales que se están dando estos días en mi tierra. Me fastidia ver que en este país ni políticos ni ciudadanos somos capaces de entendernos por las vías pacíficas y respetando que no todos somos iguales, ni queremos lo mismo, y que no hay mejor manera para resolver conflictos que las urnas. Lo que más me interesa es el presente y el futuro que me espera no tanto a mí, sinó a mis hijos. Y por supuesto me gustaría que fuese un futuro con más empatía, respeto y sin miedo a dar la voz al pueblo en las tomas de decisiones, pero claro, ésto último no interesa a los polícitos (y a muchos otros ciudadanos) actuales. Pero en fin, siempre se está a tiempo en solucionar las cosas lo mejor posible, y por el bien de todos, que es lo único que deseo. Pero los humanos somos así, a veces tenemos que estar en la punta del abismo para aceptar cambios y rectificar.
    Un saludo, y gracias por tu comentario.

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  3. Por cierto, a mis padres no les reprimían hablar el catalán porque son andaluces. Pero como muchos otros, también tuvieron que sufrir lo suyo antaño.

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