23 de febrero de 2022

Vivencias

 

Hemos venido a vivir experiencias. El miedo nos enjaula y nos aisla. Superarlo, que no esquivarlo, nos permitirá venir a lo que hemos venido: vivir, experimentar.

Habrá momentos agradables, otros no tanto. No podrás evitar que muchos de ellos acontezcan, pero sí decidir cómo responder ante ellos.

No te tomes la vida de forma personal, sinó vivirás siempre ofendida. La vida te trae cosas y tú decides si te afectan o no.

La resistencia a los acontecimientos muchas veces nos ocasiona más sufrimiento que el propio acontecimiento.

A veces notarás que algunas de esas experiencias sólo te están rompiendo. No, no sólo te están rompiendo, te están transformando. A veces hace falta romper ciertas cosas para volver a recomponerlas de distinta manera, como si de un Lego se tratara.

La vida es un laboratorio dónde cualquier experimento cabe ante las manos firmes y preparadas. Y como ante cualquier experimento no tengas miedo en probar y probar hasta obtener el resultado esperado. No todo se consigue a la primera. Sé cabezota ante aquello que verdaderamente importa.

Buenos días Vida. Buenos días Verdecill@s.

 

 

20 de febrero de 2022

A pasos de niño

 


Aprendo de sus miradas no contaminadas, de los colores en los que enfocan la vida. 

Aprendo de sus cabecitas en ebullición, de esas cabecitas tan creativas. 

A veces me explican cosas que yo no veo o me ofrecen la mirada desde un punto de vista diferente.

Me muestran que no siempre hay una única explicación a todo.

Qué gran riqueza te aporta la infancia y qué gran interés muestran en todo aquello que les rodea. No fijan la mirada sólo en un punto, al frente y hacia delante, sino en todo su alrededor, arriba, abajo, derecha, izquierda y a dentro.

Muchas veces no tengo respuestas a sus preguntas, sólo los que tenéis la gracia de tener niños a vuestro lado descubriréis que pueden hacerte hasta la pregunta más inverosímil. Pero lo importante no es tener las respuestas sino planteártelas, y ellos hacen que te las plantees, contínuamente.

Otras veces son ellos los que responden a mis dudas, con su sencillez y su mente no contaminada.

Sus ganas por conocer, por saber, por aprender, me impulsan también a mí como si fueran una palanca en mi vida. Son mi catapulta.

No tengo ni idea de lo que nos deparará el futuro, pero estoy orgullosa y feliz de acompañarlos en toda esa riqueza que les (nos) aporta la infancia.

¿He dicho que aprendo? No. Me recuerdan lo que ya conocía, lo que ya vivía, y que un día olvidé. 

Gracias por enseñarme a recordar y a reiniciar.

 

 

De segundas


Las segundas oportunidades están llenas de sombras y de reflejos.

Las segundas oportunidades a veces son un auténtico tsunami y una oporunidad de hacer las cosas mejor, o cómo mínimo, de hacerlas de forma diferente. Es la bendita gracia de la experiencia bien aprendida. Las nuevas oportunidades te brindan la posibilidad de poder ver aquello que te pasó desapercibido. 


6 de febrero de 2022

Ensalada de lechuga

 

Unos trocitos de membrillo, unos salpicones de manzana, pipas, pansas, queso y esas salsitas que le dan tanta alegría. Así son mis ensaladas, las ensaladas que me gustan. Dónde cada ingrediente enriquece al conjunto.

Hemos artificializado nuestro entorno y ahora lo estamos haciendo con nosotros mismos.

Nos estamos artificializando. Antes era un poco de maquillaje y unos tacones. Ahora filtros, distorsionadores de voz, pensamientos y creencias cada vez más globales... Desaparece nuestra identidad propia y damos paso a la colectiva. Desaparición de lo diferente.

No, no hará falta que inventen robots que nos substituyan. Seremos nosotros los robots de carne y hueso. Y no queda mucho. 

No quedará nada de lo que un día fuimos.

De aquí poco la ensalada será sólo de lechuga.

 

3 de febrero de 2022

¿Quién soy?




 

No es fácil convivir en un mundo donde casi todo es humo, donde la verdadera identidad de cada uno se hace invisible detrás de decenas de filtros de fotografías.

No es fácil vivir en un mundo dónde la tristeza se camufla y la belleza se crea a partir de estereotipos y de los efectos de las aplicaciones. 

Dónde las distancias hacen más fácil el engaño.

No es fácil vivir en un mundo de personas emmascaradas, dónde abunda la falsa felicidad, se esconden las tristezas y dónde las personas necesitan retocarse para mostrarse al resto del mundo en vez de quererse por lo que son y por cómo son, y enamorar por sus actos, palabras y realidad.

No es fácil vivir en un mundo de personas avergonzadas que optan por darse a conocer por lo que no son.

No es fácil vivir en un mundo dónde lo importante es la imagen que se da y en el que a la que escarbas un poco te sientes, engañada.

Y todos caemos en un momento u otro en esa trampa, la trampa de enamorarte, de interesarte, de empezar a relacionarte de una foto retocada, de un perfil creado a través de "copiar y pegar" o de "compartir" de otras personas o cuentas, o de unas palabras que se hicieron como suyas cuando ni tan siquiera conocían su significado y menos aún, predicaban con ellas.

Qué difícil vivir en un mundo en el que la distancia entre lo que se muestra y lo que se Es es más larga de lo que nunca antes había sido.

Qué difícil es encontrar hoy en día a personas que emitan su propia luz y no la del reflejo de unas falsas pantallas o cuentas de instagram.

Dónde sus expresiones no son sus expresiones, dónde las miradas no son sus miradas. 

Cuántas Verdaderas Bellezas habrá escondidas tras esos perfiles por no ser capaces de mostrarlas. 

Cuántas mentiras se esconderán tras esas imágenes. ¡Cuántas decepciones!

Hoy en día cobra sentido más que nunca aquello de "lo esencial es invisible a los ojos" e imprescindible mirar bien la mandarina antes de metértela en la boca.

 

En internet puedes aparentar todo aquello que quieras, pero no serlo.


 

1 de febrero de 2022

Lo esencial es invisible a los ojos

 


 "Lo esencial es invisible a los ojos" (El Principito)

 

Hablamos de los bosques terrestres i, en especial, de la selva Amazónica, como los grandes pulmones del planeta, los grandes productores de oxígeno, cuando el verdadero pulmón se encuentra debajo del agua, invisible a nuestros ojos: el fitoplancton.

Cuando pensamos en el medio marino a todos nos suele venir imágenes de grandes cetáceos, delfines, playas paradisíacas,... olvidándonos del fitoplancton, unos organismos que tienen un papel muy importante y fundamental en el planeta, y no sólo a nivel marino.

El fitoplancton está formado por más de 20.000 especies diferentes y son los principales productores primarios de los ecosistemas marinos y el punto de partida de toda esa energía y nutrientes indispensables en las cadenas tróficas.

La Selva Amazónica genera alrededor del 6-9 % del oxígeno del planeta, ¡el fitoplancton genera alrededor del 50-85 %!. 

Pero el fitoplancton no es sólo el gran pulmón del planeta sinó que también absorve el 40% del CO2 del planeta. 

La producción de oxígeno por parte del fitoplancton se está viendo afectado por el cambio climático. El incremento de la temperatura de los océanos hace que produzca menos oxígeno, lo cual puede llegar a ser una gran catástrofe para la vida marina, con la extinción masiva de especies.

No, no quiero quitarle importancia a la selva amazónica, sólo quiero que se reconozca la gran imporancia de nuestros oceános y cómo a veces, lo más importante, es invisible a nuestros ojos.

Un ejercicio que hago a menudo para entender y comprender mi alrededor, mis relaciones sociales, nuestros comportientos, es traspasar esas vivencias a ejemplos de la madre naturaleza. Y es a través de esos ejemplos, como el del fitoplancton, que logro entender muchas de nuestras cosas.

En este caso, es clave conocer para conservar. Si no conocemos la existencia del fitoplancton y su importancia, no seremos capaces de valorarlo y por consiguiente protegerlo. Y lo mismo pasa con las personas, sinó conocemos su interior, aquello imperceptible a nuestros ojos, no seremos capaces de valorarlos y relacionarnos con éxito y respeto.