Virus

 

Comparto hoy con vosotros esta reflexión.

Para cambiar el sistema, hay que entrar dentro del sistema. Jugar a su juego, y con sus reglas de juego entrar a dentro para explosionarlo. ¿Qué hacen sinó los virus? Entran en el sistema operativo y des de allí lo destruyen.

En esta lucha se necesitan gusanos, adwares, spyware, botnets... y cuando seamos muchos convertirnos en un gran Troyano.

No se consigue NADA reflexionando, criticando, maldiciendo, desde el sofá del comedor. Se consigue ACTUANDO. Y si queremos  grandes cambios tenemos que ser MUCHOS.

"Yo no me pongo la mascarilla", "yo no me vacuno", "yo me cambio de compañía de luz".... eso son sólo PATALETAS que no sirven para nada, más allá de autoengañarte creyendo que eres la ostia y mostrar fachada. Pero no eres VIRUS.

No soy ni una suicida ni una hipócrita que cree que las cosas se pueden cambiar fácilmente y en pocos días. Ni hoy es el primer día que me planto en barricadas. Llevo ya varias batallas perdidas, pero de todas ellas se aprende para la siguiente. Y tengo claro que Ahora quiero volver a ser ÚTIL.

 
Hoy he conseguido mi primer objetivo, ganar unas elecciones para meterme dentro del sistema para defender a los niñ@s. Paso de enervarme y criticar el trato que están teniendo últimamente a meterme dentro para tener voz y voto, representarlos y ser mosca cojonera. No es gran cosa, pero pasito a pasito, y acompañada por más compañeros, hoy aquí, mañana allá, un día pasaremos de ser unas simples moscas cojoneras a ser una pesadilla. Es la única manera, es la única que veo factible. No existen cambios rápidos, sinó que se consiguen con tozudería, perseverancia, paciencia, inteligencia, sangre fría y calma.

Mis lemas siempre han sido: 

- Este mundo está lleno de utopías que se han acabado haciendo realidad.
- Piensa globalmente, actúa localmente.
Se empieza des de abajo, hacia arriba. Cambiando las cosas fáciles para así, poco a poco llegar a las difíciles.

A parte del odio, hay dos cosas que mueven el mundo porque son las que mueven a las personas: el AMOR y las GANAS.

No sé si existirán las señales, pero ha sido saber los resultados y salirme al encuentro este impresionante y bello arco iris. Y me he dicho, sí, es lo que ahora quiero, es el camino.

Así que, ahora sí, dejo este blog durante un tiempo (a saber si para siempre) para dedicar mi tiempo a cosas útiles, a la gente que quiero y a todo aquello que siempre soñé y que todavía ni tan siquiera he intentado.

Y no me importa los resultados, conseguirlo o no conseguirlo, sinó hacer lo que siento que quiero hacer. Nada más.

Punto y a parte

 

 

La cabeza me explota de nuevos proyectos personales y profesionales que tengo en mente. El corazón no deja de palpitarme anhelando poder hacerlos realidad. Y el estómago está repleto de mariposas.

Estoy nuevamente muy ilusionada. Con muchas ganas. Y me siento ligera. 

 

Después de cada tormenta, las lágrimas se secan y vuelve a salir el Sol. Y si se te cierra una puerta, sal por la ventana.

 

Hacía tiempo que no tenía tan claro por dónde quiero caminar. 

 

A veces los astros se alinean y te dan ese empujoncito que a veces necesitas y se deshacen los nudos de tu vida. La bruma se desvanece y puedes volver a divisar nuevamente tu camino. 

 

Igual no tengo del todo claro el trazado a seguir, pero sí a dónde quiero llegar y que es lo que no quiero.

Y allá voy...con las cosas más claras que nunca. Con la mochila, las maletas, las chirucas y los sueños desempolvados, porque estas cuatro cosas no están hechas para permanecer mucho tiempo dentro del armario. 

 

Planificando viajes y salidas, vivencias, estudios, sueños... 

 

Hoy es un buen día para empezar otro nuevo 'resto de mi vida'.

 

Puede que algun día regrese a contaros mis vivencias, mis meteduras de pata, mis éxitos, mis cambios, mis aciertos, mis fracasos... a saber... Pero ahora toca vivirlos. 

 

Igual a mi regreso seguiré siendo la misma, o puede que distinta, o sólo con algunos nuevos matices. A saber... Lo verdaderamente importante para mí es que soy lo que yo sé que soy, y no opiniones de los demás, sobretodo si ni tan siquiera me conocen. Que el tiempo me enseñó qué y quiénes son los verdaderamente importantes en mi vida y a ser capaz de aceptar los fracasos tanto como los éxitos con calma, sangre fría y cabeza.

 

Los que soys más cercanos a mí y estais en mi vida, ya sabéis dónde encontrarme y tenéis linia directa conmigo. A los demás, nos vemos a la vuelta... o no.

 

Hoy escribo un nuevo Punto y a Parte en mi Vida.

 

Copiar y pegar o... reflexionar

 

 

Seamos realistas, en un mundo tan digitalizado, con tanta información al alcance de un clic es más importante que nunca comprender de dónde provienen los significados y los resultados que no memorizarlos sin entender nada.

 

El mundo cambia.

 

¿De qué sirve memorizar algoritmos si no entiendes lo que significan o para qué sirven y si, además, los puedes calcular en una calculadora?. ¿De qué sirve memorizar significados de conceptos, si los puedes encontrar en Google?. Sí, para ejercitar la memoria está genial, pero...

 

Si no queremos que este mundo se convierta en un mundo de "copiar y pegar", en un mero mundo de repetición de patrones, es más importante que nunca pensar y reflexionar de dónde provienen las cosas. Entender el cómo y el por qué. 

 

Pensadlo un momento, nuestros hijos ahora hacen los deberes buscando en Google, y para un mismo trabajo encuentran todos ellos en Google los mismos resultados. Así, todos los trabajos iguales. ¿No os da qué pensar? Vamos a perder totalmente la diversidad, en todos los aspectos.

 

Estamos dejando nuestro aprendizaje (y muchas más cosas) en manos exclusivamente de máquinas. Por eso siempre defiendo el buscar también las respuestas en las personas.

 

Reflexión

 

 "Uno de los principales objetivos de la educación tiene que ser ampliar las ventanas por las que vemos el mundo".

(Arnold Glasow)

 

Puntos

 

 En la vida existe el punto y seguido y el punto y final. Y mientras quede tinta quedan muchos relatos que escribir hasta que a cada uno de nosotros nos llegue nuestro punto y final.

 

¿Cosa de niñas?

 

A veces pienso que soy una niña haciendo cosas de adultos. No es que vaya todo el día con una piruleta en la mano, pero sí que en determinadas cosas actúo como tal.

 

Los niños piensan y actúan de forma muy diferente a la adulta. Ven el mundo con otros ojos. La empatía, el amor, las fantasías,... las rabietas... las cosas no se viven igual ni con la misma intensidad de niño que de adulto. Los que tenéis niños alrededor seguro que sabéis de qué os hablo.

 

A veces pienso que no acabo de encajar completamente en este mundo de adultos precisamente porque hay cosas que pienso y vivo como una niña. Entendedme, no porque sea una irresponsable, una vividora, me importe todo un pimiento y me pase el día en patinete en la calle. No. Sinó porque siento y vivo determinadas cosas como una niña. La forma de divertirme, de pasármelo bien, de entender la vida. Las fantasías. La imaginación. Lo que me hace verdaderamente feliz. Lo que entiendo como el amor, como un concepto mucha más amplio y capaz de tomar formas muy distintas, más allá de las preestablecidas en el mundo de adultos. Y eso puede dañar a la gente de mi alrededor, que vive y piensa como adultos sin comprender mis enfados, mis anhelos o mi frustación. 

 

Puede que en algún momento de mi niñez decidiera bloquear al adulto o que ya de adulta, volviera a mi niñez frustada con lo que veía a mi alrededor. Quién sabe. A saber...

 

A veces pienso que quizás llegó la hora de soltar definitivamente a Peter Pan y Campanilla y ser 100% pirata. Sucumbir totalmente a la edad y al mundo de adultos que hemos creado. Quizás...

 

A veces pienso que es precisamente esa niña que despunta de tanto en tanto lo que me hace sobrevivir y ser feliz en este mundo de locos. 

 

No estoy chapada a la antigua, estoy chapada a la niñez. Y no sé si debería ir al planchista.

 

¿Ken...qué?

 

A mi edad y todavía no sé nombrar el nombre de esta famosa cadena de comida rápida: KFK.

¿A alguien más le pasa?

 

Va de mapas

 

Con pocos años de vida me encantaba ver las películas del oeste con mi padre. Pero no me impresionaban los vaqueros y los cowboys, era más de indios.

 

Más tarde, pero todavía en mi primera infancia, empezó a encantarme las pelis de artes marciales de Bruce Lee, ¡me las tragué todas! Fue aquella época dónde empecé a practicar el Tae-kwon-do, hice campeonatos, etc.

 

Pero entre vaqueros, indios y karatekas se coló la gran fascinación de mi vida: el espacio. Ser astronauta. Los enigmas del espacio. Incluso a corta edad iba a la biblioteca a buscar información de qué debía hacer para ir a ser astronauta a la Nasa. La bibliotecaria flipaba al ver a una niña de corta edad preguntarle cosas al respecto. Para entonces no existía internet, que lo sepais, sí...había vida antes de internet y Google, y tenías que ir a la biblioteca o preguntar a la gente para encontrar respuestas. Ahora preguntas a alguien y te responde "busca en Google". Ecs. 

 

Pero ese sueño, con la edad, se fue desvaneciendo, aunque no mi pasión por el espacio. Me di cuenta que tenía que cursar carreras de astrofísica, mates, ... muchas carrera, dífiles,... y caras...a precios que para entonces no estaban en la mano de una familia pobre de un barrio de barracas. 

 

Después fui fanática de Chuck Norris y de las pelis de terror. Recuerdo, con apenas 9 o 10 años, quedarme a solas en el comedor de casa para ver la sesión de terror de los viernes noche. "Gaia, no entiendo cómo te puede gustar eso!", me decían mis padres.

 

Después llegó la etapa de la edad media, para continuar con las aventuras de piratas y buscadores de tesoros. Me chiflaban los libros de "Elije tu propia aventura". ¡Me encantaría que los hubiera para adultos! Poder ser tú quién elije el desarrollo de la historia. A ver si algun escritor se anima.

 

Más tarde llegó la ciencia ficción. Star Wars y compañía, ... y no, no fui de Star Treck y soy más de BattleStar Galactica. La ciencia ficción continua siendo mi género favorito, junta al terror.

 

Y es precisamente esa pasión por explorar la que me ha hecho interesarme tanto por el estudio de la Tierra, primero en superficie y ahora, en sus profundidades (fondo marino y debajo de la corteza terrestre). En el espacio hay mucho por descubrir, pero aquí, en la Tierra, ¡también!

 

Siempre me ha encantado mirar mapas. Coger mapas de diferentes temáticas y descifrarlos con sus leyendas. Mirarlos y remirarlos para entenderlos y buscar respuestas a través de ellos. ¡Lo encuentro muy divertido y excitante!

 

Y aquí me tenéis, yo con mis mapas. 

 

Disfruto delante de un mapa como delante de una gran bola de azúcar de feria.

 

Y quién sabe, igual, algún día, alguno de ellos, me llevará a esos lugares que se me aparecen en sueños.

 

Nuevo proyecto

 

 

Iniciando ya la especialización en geología y vulcanismo.

 

Como expliqué hace unos días, empiezo nueva etapa con ganas de especializarme en geología y vulcanismo, dos asignaturas que tengo pendientes de hacer de hace años y que me apasionan. Y quién sabe si acabo dedicándome a la investigación...

 

Así que dejo un poco apartado el aprendizaje interior para volver a enriquecerme con nuevos conocimientos del exterior. Aunque ambos se complementan y alimentan. 

 

En fin, nuevos proyectos personales y profesionales que me tomo con muchísima ilusión.

 

Nunca es tarde si la dicha es buena.

 

Momento de girar páginas y volver a pensar mucho más en mí y no tanto en los demás. Al fin y al cabo la mejor energía aprovechada es la que gastas en ti misma. AutoEficiencia energética.

 

 

 

Lo absurdo

 

Lo absurdo deja de serlo des del momento que lo aceptamos tal y como es.

Afrontar

 

Hay que afrontar la vida con toda su incomprensabilidad.

Amanecer

Los días mueren y nacen con cada nuevo amanecer. 

 

Que un día haya sido malo, no significa que el siguiente también lo vaya a ser. Al igual que un buen día no tiene por qué volverlo a ser.

 

Y así me despierto cada mañana. Así me gusta vivir el calendario, los días, los meses y los años. Creyendo que con cada nuevo amanecer, nuevas oportunidades, y que nunca un día tiene por qué ser como el anterior.

 

¡Buenos días, verdecill@s! Amanezca cómo amanezca.

Luna

 

 ¡Jooooder!

 

Ni Jopainas, ni Recórcholis...¡¡JOOOODER!!

 

Es lo primero que he dicho al salir hoy de casa.

 

Salir del garaje y encontrarte de caras con esa peazo y hermosa Luna de hoy no tiene precio. Para qué después digan que no hay luz en la oscuridad.

 

Cada mañana salgo de casa, todavía a oscuras, con aquellas ganas de comerme el mundo, aunque a veces acabe comiéndome él a mi. Da igual la ropa que lleve. A veces consigo combinármela decentemente según los patrones preestablecidos, y otras al cabo del día me doy cuenta de "Gaia, ¡qué coño te has puesto hoy!". Pero da igual con que salga vestida de casa si salgo con una sonrisa en la cara. Una sonrisa es la mejor vestimenta y la que mejor cae a todo el mundo.

 

Me encanta ese trayecto en coche todavía de madrugada. Recorrer las carreteras a oscuras mientras saco alguna carcajada con los comentarios de mi programa favorito de la radio, o cantando y baalando al volante. Sí, soy de esas que la gente que me mira por el retrovisor o por la ventanilla de su coche me ve bailando y cantando como una posesa. Incluso alguna vez me han aplaudido al parar en un semáfaro. Sí, aunque no me creais, me ha pasado más de una vez. La primera vez fue un "trágame tierra" y ponerme roja como un tomate, ahora ya saludo cual artista encima de un escenario. Es lo que tiene la edad, que pasas de ser una sinvergüenza a no tener vergüenza.

 

Y hoy, joder...¡qué Luna! parecía incluso que con unas buenas chirucas pudieras llegar a ella en unas cuantas horas.

 

PD: no es que el día esté brumoso, sinó que la cámara de mi móbil no permite tomar fotos de calidad. Bueno, si os soy sincera, con la reflex tampoco todavía he conseguido hacer una foto digna de la Luna, es una asignatura pendiente que tengo. Pero he querido dejaros una foto mía, aunque en este caso no refleje la belleza real que hoy emana la Luna.

 

 

Los días mueren y nacen con cada nuevo amanecer. 

 

Que un día haya sido malo, no significa que el siguiente también lo vaya a ser. Al igual que un buen día no tiene por qué volverlo a ser.

 

Y así me despierto cada mañana. Así me gusta vivir el calendario, los días, los meses y los años. Creyendo que con cada nuevo amanecer, nuevas oportunidades, y que nunca un día tiene por qué ser como el anterior.

 

¡Buenos días, verdecill@s! Amanezca cómo amanezca.

 

Al límite

Una canción para cuando estás al límite. Para cuando los días son largos, las noches solitarias y crees que ya has tenido suficiente.

 

Todos podemos sentirnos así algún día. Podemos tenerlo todo y sentirnos vacíos. Momentos en que se nos cierran todas las puertas y tenemos ganas de echar el telón para siempre. Momentos en que nos sentimos perdidos, todo nos sale mal y perdemos el ánimo para todo. 

 

Cuando alguien está en esos momentos es muy fácil decirle "Resiste", sobretodo cuando no eres tú a quién se le ha hecho oscura la luz del Sol.

 

No es cuestión de dejar ir palabras de apoyo y fuerza, sinó de acompañar en lo que aquella persona está viviendo. Dar la mano.

 

Va por vosotros, va por todos. Todos lloramos.