Y aquí estoy, sintiendo el dulce roce de esta melodía en mi oído, que me llena de sensibilidad, belleza y ternura.
Una delicada melodía que me inunda de paz, serenidad y un gran deseo de cerrar los ojos y volver a soñar, a sentir, a vivir.
Me traslada a aquella cajita de música que tuve de niña, aquella que guardaba mis secretos y mis ilusiones.
Una melodía que me abraza, me tranquiliza... y me abre de nuevo las alas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario